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Durante los últimos años, la demanda agrícola está buscando la mejor calidad en lácteos. Por eso en la actualidad las estrategias productivas y alimenticias del mundo vacuno se fundan en el uso de los
granos en las dietas para conseguir buenos resultados. Además, los productores buscan un cambio basado en la producción de pasturas, acompañado por una importante reserva de hierba.
Tanto los avances en la ganadería pastoril que muestran una gran alternativa de bajo costo productivo que señala que se abre paso camino a un mercado más exigente. Como los conocimientos agronómicos y las tecnologías que luego de la crisis láctea del 2000/1 generaron mejores rotaciones, mejores cultivares de alfalfa, mejores
fertilizaciones y preoreo para evitar la pérdida de hierba fresca.
Martin Favre, ingeniero agrónomo de Santa Fé, mantiene que: “la base de la alimentación del animal es el pasto, puesto que prepara a las vacas para un mercado con altos estándares de calidad, donde se combina en la producción el menor impacto ambiental con el respeto al bienestar animal”. Esto lo sostiene porque Favre en un período de diez años, consiguió un aumento progresivo de la productividad y la calidad de las pasturas, de la carga por hectárea y de la producción de leche basado en la alimentación por hierba fresca.